El PAIS 13.12.2017 
HISTORIA DE  UNA ZENOFOBIA A ESPAÑA
¡MAÑANA PUEDES SER TU!

Víctor Láinez, de 55 años, falleció ayer en Zaragoza como consecuencia de las lesiones que sufrió la madrugada del viernes tras ser agredido a la puerta de un bar de la capital aragonesa por dos individuos. El suceso se produjo tras una discusión entre la víctima y sus atacantes a causa de los tirantes con la bandera de España que lucía el primero. La policía detuvo el lunes a uno de los presuntos agresores, Rodrigo Lanza, un activista del movimiento okupa que en 2008 ya fue condenado a prisión por dejar tetrapléjico a un guardia urbano en Barcelona.
El suceso, adelantado por El Heraldo de Aragón, se produjo sobre las 2.30 del viernes en la calle Antonio Agustín, en el casco viejo de Zaragoza, donde la víctima y su presunto agresor coincidieron mientras tomaban copas con sus respectivos acompañantes en el bar El Tocadiscos. Según los testimonios recabados por la policía, el atacante y las tres personas que iban con él —un hombre y dos mujeres— increparon a Láinez por sus tirantes y le llamaron “facha”. Él respondió a los insultos.
Tras el incidente, Láinez abandonó el local y los dos agresores salieron inmediatamente tras él. Siempre según los testigos, fue Lanza quien supuestamente propinó a Láinez un fuerte golpe en la cabeza con una barra metálica que le dejó inconsciente en el suelo. El agresor y su acompañante propinaron además varias patadas al caído antes de huir.
Láinez, natural de Terrassa (Barcelona), aunque residente en Zaragoza desde hace años, ingresó poco después en el Hospital Clínico de la capital aragonesa con un severo traumatismo craneoencefálico y cuatro coágulos que le provocaron la muerte cerebral. Ayer se produjo su fallecimiento.
La misma noche de la agresión, la Policía Nacional abrió una investigación que desde el primer momento se dirigió hacia integrantes de los grupos radicales de izquierda zaragozanos. Las pesquisas permitieron la detención de Lanza a última hora del lunes. Anoche, la Policía detuvo, y luego dejó en libertad, a su acompañante, a quien imputa omisión del deber de socorro pues, aunque estaba con el presunto agresor, no participó en el ataque.
Condena previa
Fuentes cercanas a la investigación señalan que el rápido arresto fue posible gracias a la descripción que los agresores que hicieron los otros clientes del bar. Además, Lanza fue visto pagando en otro bar de copas con una tarjeta de crédito, lo que facilitó a los agentes su identificación.
No es la primera vez que este activista okupa se ve involucrado en un incidente violento grave. En febrero de 2008, fue condenado por la Audiencia de Barcelona a cuatro años y medio de cárcel por atentado al considerarle responsable de las graves lesiones que sufrió dos años antes un guardia urbano que acudió a desalojar el edificio que ocupaban él y otros ultraizquierdistas. El Supremo elevó la condena a cinco años. La sentencia recalcó que no existía “la más mínima duda” de que fue Lanza quien lanzó al policía una piedra que provocó que cayese al suelo y se causara una lesión medular que le ha postrado en una silla de ruedas de por vida.
La agresión se produjo la madrugada del 4 de febrero de 2006 a las puertas del número 55 de la calle de Sant Pere Més Baix, cuando varias patrullas de la Guardia Urbana barcelonesa acudieron a una casa okupa en la que se celebraba una fiesta sin permiso. El fallo consideró probado que Lanza y otras 20 personas se enfrentaron con piedras, palos y botellas a la policía.
Un documental de 2014 realizado sobre este incidente, titulado Ciutat Morta, protagonizado entre otros por Lanza, intentó presentar los hechos como un montaje policial.

Comentarios

Entradas populares de este blog

25 julio 2020 Cambrils

Invitación para el 23 de agosto en Premiá de Mar